Dolor...

Todos como seres humanos hemos experimentado el DOLOR, sabemos que no es un sentimiento o estado muy agradable, aunque ciertamente el sufrimiento es parte del vivir, del ser humano, siempre hay o habrá algún aspecto, detalle, persona o situación que lo genere, es imposible que un ser viva sin una sola gota de dolor o sufrimiento, hay que aprender a vivir con él, más no para él, ya que al alimentarlo con negatividad y desanimo este crecerá y permanecerá.

Desde nuestro nacimiento experimentamos la angustia, al separarnos de la tranquilidad del cálido vientre materno, al adentrarnos a un mundo desconocido que nos genera angustia.

Es por eso que bebemos estar preparados para enfrentar las demandas de la vida cotidiana, y tomarnos un respiro para meditar, reflexionar, pensar y sobre todo discernir sobre lo que realmente vale la pena, existen ocasiones en las que le brindamos importancia a situaciones negativas que terminan por agotarnos, a veces suele pasar que pasamos cosas por alto, haciendo a un lado las cosas más importantes, ante todo está la salud emocional, física y espiritual en las personas.

Las metas son la base del ser humano y el amor es el más potente motor, el nos guía, solo hay que mantener un equilibrio emotivo-racional, cuando una persona pierde la motivación y  se deja de plantear metas, se genera un cierto malestar, inclusive desanimo ante la vida, por eso siempre debe haber una utopía, realmente no se puede vivir sin utopías, siempre hay que luchar hasta ver concretados nuestros objetivos.

Tú, solo tú tomaras las riendas de tu vida y sabrás qué camino tomar.

Deieu Jaramillo.